Nel mezzo del cammin di nostra vita

Al contemplar la rosa de los bienaventurados en el Paraíso –sentados en miles de gradas, como espectadores de un teatro ancestral y divino, contemplando el espectáculo del universo-, Dante se da cuenta de que se ha quedado solo, y debe terminar su viaje encarándose por sí mismo a la más alta luz, en el misterio insondable de la creación.

Franco ofreció en mil ocasiones su voz, su gesto y su calidez a las palabras de los poetas. Esta vez, quisiéramos ofrecerle nuestro homenaje, lleno de agradecimiento y añoranza, con este pequeño recorrido por los caminos visibles e invisibles de la Divina Comedia, que se cierra con el amor que mueve el sol y las estrellas .

Una producción de La Perla 29 i Festival Temporada Alta